Cuando comenzamos a plantearnos la construcción o reforma de un baño empezamos, en primer lugar, a pensar en revestimientos de suelo y de pared, en sanitarios o en mobiliario, pero hay un elemento que condicionará, no solo la estética del baño, sino la experiencia diaria que tengamos en el: nos referimos al plato de ducha.
En este post vamos a ver cuál es el mejor plato de ducha para tu baño y que características y ventajas de puede ofrecer.
¿Por qué elegir un plato de ducha?
El plato de ducha ya es el elemento indispensable para un cuarto de baño, ya incluso superando a las bañeras, esto es debido a sus menores costes y mayor funcionalidad, así como mayores ventajas, ya que son:
- Más prácticos
- Más fáciles de limpiar
- Más moldeables a distintos espacios
- Antideslizantes
- Ideales para personas mayores o con movilidad reducida
Además de los menores costes y mayores ventajas, los platos de ducha ofrecen una opción idónea para baños pequeños, donde la instalación de una bañera es imposible por su tamaño.
Disfrutar de estas ventajas no implica perdida en funcionalidad o diseño, ya que los platos de ducha están diseñados para ofrecer todas las prestaciones atendiendo a todos los estilos, colores, texturas, formas y materiales existentes.
Cabe destacar que, respecto a una bañera, un plato de ducha nos implica un ahorro en su uso diario ya que el consumo de agua es menor, un ahorro de tiempo en su instalación y un ahorro de tiempo y dinero en su mantenimiento.
¿Cómo elegir el plato de ducha ideal?
Un plato de ducha es una plataforma que puede ser fabricada en distintos materiales, como pueden ser: cerámica, ladrillos, piedra natural, acrílico, de carga mineral o resina, etc.
Pueden adquirirse con medidas personalizadas o a medidas estándar, según el material y proveedor y, además, hay platos de diseño para todos los estilos de baño.
A la hora de elegir un plato de ducha, no solo se elige por precio y calidad, sino por la adaptabilidad al entorno donde se va a instalar y por reunir la mayor cantidad de ventajas posibles.
Además, un plato de ducha debe cumplir con 3 requisitos principales: Resistencia, durabilidad y diseño.
¿Cumple estos requisitos algún plato de ducha?
¿Cuál es el mejor plato de ducha?
Hay un tipo de plato que reúne todas estas características y que, además, puede dar un toque de diseño a tu baño: El plato de ducha de resina.
Este tipo de plato también se conoce como “Plato de ducha de pizarra”, esto es debido a su acabado parecido a la piedra natural.
Este tipo de plato, además, reúne todas las cualidades esenciales citadas en el apartado anterior:
La resistencia
Tanto a golpes como a accidentes, además de aguantar con mayor facilidad cargas pesadas. Su revestimiento es también resistente a el efecto de la luz sobre los colores, a los arañazos y a posibles grietas.
Durabilidad
La resina mezclada con cargas minerales se convierte en material ideal en cuanto a durabilidad se refiere. Estos platos tienen un revestimiento denominado “Gelcoat” que les hace más resistentes a la humedad y a condiciones agresivas.
Diseño
El plato de ducha de resina es el más versátil en cuanto a diseño se refiere: texturas, bordes, acabados e imitaciones a madera o piedra son, entre otras, cualidades que no pueden ofrecer otros platos de ducha.
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